Diciembre es un mes donde evaluamos nuestros objetivos logrados y las metas no alcanzadas, pero por lo general no analizamos sus cargas energéticas y sus vibraciones, que nos acompañaran los próximos doce meses.
Algunas disciplinas como la astrología nos abren una excelente guía en relación al movimientos de los astros y la tierra, señalando su influencia en los animales y seres humanos, otras como la numerología, nos hace entender la ciencia de los números y como estos influyen en las energías personales y las características que vibra en cada número.
El año 2018 estuvo y estará hasta el 31 de diciembre con una vibración número 11 y cómo lo sabemos?, por una simple sumatoria 2 + 1 + 8 = 11 este número esta caracterizado por dos energías masculina y femenina, un duo que nos mantiene en cambios y cómo los sabemos, al reducirlo 1 + 1= 2.
En mi caso fue un año de muchos cambios, de cierre de ciclos algunos en paz otros, por el momento no, cada uno con una características diferentes y con lecciones de vidas unas gratas otras no, pero sé que todo lo que pasa debe ser así. Y la aceptación es la llave para dejar fluir las situaciones que no sean gratas, en algunas ocasiones le he declarado a mi Ángel de la Guarda y a mi Yo Superior que hasta aquí llego yo, no puedo manejar esto, ustedes encárguense y he obtenido la respuesta.
Ahora se abre un nuevo año, 2019 con una vibración numerológica 3, la comunicación y las relaciones públicas, que me viene como anillo al dedo por yo ser número 1, este valor lo obtienen al sumar todos los números de tu fecha de nacimiento. Házlo para conocer en que manera vas a vibrar numerológicamente en este año.
Aun que el optimismo y los placeres de la vida van a estar muy marcado en este año es recomendable estar alerta ante la parte negativa de este año, la dispersión, a no concluir con los proyectos, la exageración e incluso a la falta de dirección. La acción clave es "enfocarse y no perder los objetivos".
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